visita

MUJER SIN CADENAS es un blog de "Crisálida Perenne", que es una marca registrada de acuerdo a las leyes mexicanas.

México

México

Página Web Crisálida Perenne

MUJER: Con J de ¡JUSTICIA!


Ana Karen
Enlace:

Bessy
Enlace:

Emma
Enlace:

Angélica
Enlace:

Mireya y Judith
Enlace:

Wendy
Enlace:

Negina
Enlace:

Beatriz
Enlace:

Estrella
Enlace:

Patricia Lefranc
Enlace:

Karina
Enlace:

Cecile
Enlace:

Tina
Enlace:

Nancy
Enlace:

Lina
Enlace:

Hilda
Enlace:

Dubis Estela
Enlace:
Enlace:
Maritza
Enlace:


Gladys, sus hijas y su madre
Enlace:

Maura
Enlace:


Cecilia
Enlace:

Enlace:


Ana
Enlace:



Marcela

Una mujer de tan solo 20 años que responde al nombre de Marcela Machi, denunció ante la Justicia que su pareja la mantuvo cautiva, la golpeó, la lastimó con un destornillador e intentó quemarla. Según declaró la mujer, los ataques comenzaron hace más de un mes. El hombre la amenazó con violar a su hija de tan solo 9 meses de nacida. La Policía lo busca.

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:

Marcela Machi

VICTIMARIO:

Su pareja (nombre desconocido hasta hora)

LUGAR DE LOS HECHOS:

Tucumán, Argentina

HECHOS:

El calvario de Marcela comenzó el 5 de Septiembre cuando fue secuestrada por su pareja. Ante la desaparición de la mujer, sus familiares decidieron realizar una denuncia en la División Trata de Personas de la Policía, pensando que la muchacha, que tiene 20 años, había sido secuestrada. Nadie podía imaginar quién era su captor.

Ante el pedido de la familia, la Policía inició la búsqueda y, al parecer, un móvil patrulló la zona en donde estaría ubicado el taller. Esto provocó que el agresor se pusiera nervioso y decidiera cambiar de lugar a la víctima.

"La sacó en una moto y la intentó esconder en otra parte, pero mi cliente consiguió escaparse cuando el motor de la motocicleta se apagó en una esquina. En ese pequeño descuido, ella consiguió bajarse de la moto y subir a un taxi que la llevó hasta la casa de uno de sus familiares", declaró Martín Zottoli, abogado de la familia Machi.

"La despertaba a patadas y le provocó lesiones en diferentes partes del cuerpo con un destornillador. Además no la dejó salir de ese lugar durante, por los menos, nueve días. Según lo que pudo contar mi cliente, el taller donde estuvo recluida estaría en un barrio de la capital", dijo el letrado.

La joven pensó que todo había terminado y luego de unos días regresó a su casa en la zona de Las Mesadas, en El Cadillal.

Sin embargo, hace 15 días su pareja volvió al ataque.



"La mujer vive en una casilla. Su cama está ubicada cerca de una pequeña ventana; allí, duermen ella y su hija. Por lo general, Machi duerme con la cabeza en dirección a la ventana, pero la noche en que su pareja la volvió a atacar, había decidido invertir su posición en la cama", dijeron las fuentes.

Ese pequeño detalle, de la misma manera que el motor de la moto que se detuvo, le permitió evitar un daño aún mayor del que ya padeció. Su pareja se acercó a la ventana, le arrojó nafta y le prendió fuego.

"Machi tiene quemaduras de tercer grado en sus pies y apenas puede caminar. Además, el fuego también quemó a su hija", apuntó Zottoli.

La mujer formalizó su denuncia en contra de su pareja en la Fiscalía VIII, a cargo de la doctora Adriana Giannoni. Según informaron desde Tribunales, el hombre está prófugo y la familia de la mujer teme que regrese e intente atacar de nuevo a la víctima.


SEGUIMIENTO:
Su pareja la busca y ella sabe lo que eso significa. Tiene el cuerpo magullado y las cicatrices que se multiplican sobre su piel le recuerdan la brutalidad que su cuerpo soportó. Camina con dificultad porque sus pies están vendados.

"Después de todo lo que él me hizo, ahora sólo puedo esperar lo peor", dijo Machi.

En una entrevista, Machi contó cómo está viviendo esta situación.

¿Cómo era la relación con su pareja?
- Nos conocimos hace dos años; él es el padre de mi hija que ahora tiene nueve meses, pero nunca vivimos juntos. La única vez que estuvimos conviviendo fue durante las vacaciones de verano, cuando se quedó dos meses en la casa de mis padres. La relación no venía mal pero es una persona muy celosa y se molestaba por todo. Sin embargo, nunca me había tratado mal hasta el día que fuimos al taller. En ese lugar cambió por completo y todavía me cuesta entender cómo estuve tanto tiempo con él sin darme cuenta de que era una persona agresiva.

¿Qué pasó en el taller?
- Fuimos a ese lugar porque él quería que fuéramos a vivir juntos. Pero cuando estábamos allí, comenzó a preguntarme si le había sido infiel porque él recibía llamadas y mensajes en los que le decían que lo estaba engañando. Le dije que todo era mentira y me senté a su lado. En ese momento, él comenzó a insultarme y a golpearme. Me dijo de todo y con sus trompadas me tiró al suelo; luego empezó a patearme hasta que se cansó. Después tomó un destornillador y comenzó a lastimarme. Tengo cicatrices por todo el cuerpo. Además, con el mismo destornillador me lastimó en la nariz y la frente.

¿Cuánto tiempo duró esto?
- Fueron varios días. Por las lesiones que tengo, no puedo estar mucho tiempo sentada porque me duelen las caderas. A causa de los golpes se me fracturó una costilla. Me trataba como si fuera cualquier cosa, no como una persona. Además, mientras él me pegaba la bebé estaba con nosotros. Pienso que me mantuvo encerrada por lo menos 10 días, hasta que una tarde salimos en su moto para ir a la casa de sus padres. Pero, como no la podía hacer arrancar, me dijo que fuera caminando y que él me alcanzaría en el camino. Ese fue el momento que aproveché para escapar.

Luego de huir, ¿qué fue lo que hizo?
 - Me oculté en la casa de unos familiares por unos días pero luego volví a mi casa. Pensé que él no me iba a tratar de hacer más nada. No por mí, sino por su hija. Pero una noche, hace como dos semanas, volvió a atacarnos. Mi hija está enferma y toma su medicación a la medianoche. Luego de darle el remedio nos dormimos profundamente. Alrededor de las cuatro de la madrugada me desperté asustada, me estaba quemando los pies con el fuego que él había prendido. Salí corriendo como pude y llamé a mi mamá. Ella le gritó a mi tío, que trató de encontrar a mi pareja, pero sólo pudo encontrar la botella con nafta que había usado y sus huellas marcadas en la tierra.

A causa de los permanentes ataques que padeció la joven, su familia decidió mantenerla oculta en la casa de sus familiares, lugar al que tuvo acceso este medio.

¿Recibió nuevas amenazas de su pareja?
 - En esta semana, llamó por teléfono a mi papá y le dijo que retire la denuncia porque si no iba a "llevarse" a dos integrantes de mi familia. Tengo miedo pero no pienso ceder. Él quiere que le entregue a mi hija y que retire los cargos. Pero, ¿Cómo voy a hacer algo así, si cuando me mantuvo atrapada en el taller me amenazaba diciéndome que iba a violar a nuestra hija? Cómo le voy a entregar mi beba a una persona como él. Espero que ninguna chica viva una situación como la mía y, si les pasa algo parecido, que lo denuncien. Sólo tengo 20 años y muchos sueños por cumplir.

VIDEO DONDE MARCELA RELATA SU AMARGA EXPERIENCIA

Fuentes:
http://telefenoticias.com.ar/es/news//20111010/estuvo-secuestrada-fue-torturada-por-pareja-durante-nueve-dias/3031.shtml





Claudia

Una mujer de 34 años, identificada como Claudia Rodríguez, fue brutalmente asesinada por su ex pareja, en un violento episodio donde el victimario utilizó un mazo, en pleno centro de la ciudad de Villa María.

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:

Claudia Rodríguez

VICTIMARIO:

Cristian Moschitario

LUGAR DE LOS HECHOS:

Córdoba, Argentina

HECHOS:

Claudia Rodríguez, fue brutalmente asesinada a mazazos el 29 de Septiembre por la mañana por su ex pareja, en un violento episodio registrado en la calle Antonio Sobral al 350, a metros del colegio secundario Bernardino Rivadavia.

La víctima trabajaba en el área de Obras Privadas del gobierno local, madre de dos niños , y había salido de un edificio público ubicado en frente al establecimiento educativo a comprar bizcochos, según relataron sus compañeros.

Esa mañana, Claudia Rodríguez salió de la Municipalidad de Villa María, caminó por la calle Antonio Sobral y se topó con su ex pareja Cristian Moschitario, que estaba en un Volkswagen Senda celeste. Según los testigos, comenzaron a discutir hasta que el hombre tomó una maza y golpeó en la cabeza a la mujer, que salió corriendo del auto. La mujer se cayó en la vereda y fue alcanzada por Moschitario, que la mató a golpes con la maza.

Tras la agresión, el asesino caminó impávido de vuelta al coche, pero fue interceptado por varias personas y luego detenido por la policía.

Fuentes policiales indicaron que la mujer se encontraba separada de su esposo, identificado como Cristian Moschitario, y el motivo del feroz ataque habría sido que se negaba a retomar la relación.

La mujer tiene 34 años y fue agredida con un elemento contundente. Hacía cuatro meses que estaba separada. No hay mucha información ya que estamos trabajando”, había señalado inmediatamente después del suceso el comisario mayor Daniel Ferreyra, quien puntualizó que el sujeto fue detenido.

Por su parte, un alumno del colegio Rivadavia que fue un ocasional testigo del episodio relató el macabro cuadro.

Sentí una frenada de remis. Me acerqué a ver y encontré un hombre con una maza, pegándole a una mujer en el suelo. El hombre, luego de matarla, se levantó ensangrentado, salió caminando como si nada”, señaló Simón.

En tal sentido, Federico, un compañero y testigo señaló: “Fue muy shockeante. El hombre tenía una maza en la mano

El sangriento asesinato de Rodríguez fue observado por los estudiantes del Instituto Secundario Bernardino Rivadavia. Varios de ellos se descompusieron y otros debieron ser asistidos por personal de la institución, por lo que, ante semejante cuadro, en la escuela se hicieron talleres de trabajo con alumnos asistidos por psicólogos y psicopedagogos.

Marcharon por Claudia

Minutos después del homicidio de Claudia, las redes sociales explotaron en reclamo de justicia y rápidamente se organizó una marcha de organizaciones sociales para repudiar el femicidio de la joven madre. “Cuando maltratan a una, nos maltratan a todas. Basta de violencia de género. Todas y todos por la memoria de Claudia Rodríguez”, fue el pedido que, anoche, congregó a unas 400 personas en la Plaza Centenario de Villa María.

Agrupaciones sociales, docentes del Instituto Bernardino Rivadavia y hasta compañeros de los pequeños hijos de la víctima participaron del encuentro.

Ya en la Plaza Centenario, se leyó un documento para exigir el cese de los ataques contra las mujeres y la necesidad de que existan medidas de prevención para evitar nuevos femicidios.


Antecedentes de maltrato:
Emilio Rodríguez, padre de Claudia, aseguró que los cuatro meses en los que estuvo separada su hija del criminal, “vivió un calvario”.

Era muy violento. La trataba muy mal. En estos cuatro meses de separación, fue un calvario el que vivió, entre amenazas, no la dejaba dormir, la despertaba a ella y a los chicos. Cuando le tocaba el horario de visitas, llevaba los chicos a su madre y volvía a la casa y le hacía líos. La hacía quedar mal en todos lados”, aseguró con gran congoja el hombre.

Había cosas que no me contaba, pero vivía amenazada constantemente. Le dije que lo denunciara. No puede ser que un tipo siga así. Era muy violento”, y recordó a Claudia como una mujer “increíble, muy dulce y querida por todos”.

Claudia Analía Rodríguez era hija única, su madre había fallecido años atrás. Sus hijos  quedaron al cuidado de una de sus primas. Su padre dijo que el homicida Cristian Moschitari ya le había pegado cuando la pareja se había separado.

Me enteré de que estaba amenazada de muerte”, dijo Emilio, papá de Claudia.

Le pegó cuando se separó, yo la ví, hizo la denuncia en la policía. Pero las amenazas siguieron. Cuando estaba separada, él se llevó todo de la casa”, sostuvo el hombre. En tanto, una prima de la mujer asesinada sostuvo que el fin de semana pasado Moschitari le dijo a Claudia: “No te preocupés, yo te mato y me entrego”.

SEGUIMIENTO:
Las declaraciones del fiscal Daniel Del Vö sobre la responsabilidad de la Justicia en el crimen de Claudia Rodríguez, encendieron una polémica que sigue abierta.

Del Vö dijo que "la Justicia no es preventora, sino que actúa sobre hechos consumados" y que "para eso está la Policía".

"Nosotros tenemos que acotarnos a un código y sobre eso trabajamos, no hacemos prevención", argumentó el magistrado que está a cargo de la investigación.

Esto fue refutado por el abogado penalista Juan Pablo Bastos, quien afirmó que "si bien la obligación de la Justicia es recabar información y elementos probatorios, también debe hacer cesar los elementos que propician el delito".

Bastos opinó que la Justicia "debe brindarle protección" a la víctima de violencia familiar y "evaluar la peligrosidad del denunciado".

Finalmente, el penalista subrayó la importancia del funcionamiento de la nueva fiscalía de violencia familiar, pero se quejó de que la participación que se les otorga a los abogados "es limitada" y que los fiscales "son reacios a ordenar la detención" de los denunciados.

El fiscal Daniel del Vo aclaró que el agresor y la víctima “no estaban casados” y por eso la imputación hasta el momento es de homicidio.

Por su parte, Carolina Laborde, una prima de Claudia Rodríguez insistió en que ella había denunciado el maltrato al que la sometía su marido. "Ella estaba cansada de los golpes", insistió Laborde.

"Si ante una denuncia o una exposición no estamos cubiertos de nada, ¿para qué sirven?", se preguntó la prima de la mujer asesinada en Villa María.

A través de redes sociales y por mensajes de texto, se llamó a pronunciarse por un cese de las agresiones contra las mujeres.

El hecho generó un rápido y profundo impacto en la ciudad y las redes sociales fueron un reflejo. Una gran cantidad de usuarios de Facebook cambiaron su foto de perfil personal por una consigan o imagen en contra de la violencia de género.

¿Pudo haberse evitado el crimen?
Todo parece indicar que sí. Claudia Rodríguez estaba amenazada de muerte y, al parecer, había presentado una denuncia ante la Policía tras separarse de su concubino, Cristian Moschitari.

Así lo aseguraron ayer amigos y familiares de la víctima (entre ellos, su padre, Emilio Rodríguez) durante el velatorio y sepelio en el cementerio La Piedad de Villa María, en medio de escenas desgarradoras.

FUENTES:




Cristina
Enlace:



Graciela

Graciela Olase, tenía 45 años de edad, cuatro hijos y al momento de su muerte estaba separada de su pareja.

Trabajaba como agenciera de una conocida empresa de transporte interdepartamental de pasajeros en Villa Ismael Cortinas.


NOMBRE DE LA VÍCTIMA:
Graciela Olase

VICTIMARIO:

Presuntamente su actual pareja (de nombre desconocido hasta el momento).

LUGAR DE LOS HECHOS:

Uruguay

HECHOS:

Graciela Olase era muy popular, no solo porque era una mujer trabajadora, muy conocida, sino por haber incursionado en la arena política, siendo incluso candidata a alcaldesa de Ismael Cortinas. Además, Olase participaba en la Comisión de la 19a Semana de Ismael Cortinas, actividad que se viene desarrollando en dicha ciudad y que no se suspendió a pesar de la brutal muerte de su colaboradora.

Así se presentaba ella en una nota con Ecos Regionales, publicación de Trinidad:

Soy una vecina de Ismael Cortinas e incentivada por amigos y vecinos me llevó a la determinación de presentarme a candidata para Alcalde. Todos me conocen, no tengo una carrera política, soy una vecina con defectos y virtudes, solo una más que vive la realidad de cada uno de nosotros. Sé de la necesidad de la gente porque estoy a diario con ellos, muchas veces siendo el paño de lágrimas pues en medida de mis posibilidades he solucionado problemas. Siempre han encontrado en mí una mano extendida”.

Graciela hizo campaña con el compromiso de “buscar inversores particulares" para proyectos que les den trabajo a los ciudadanos de Villa Ismael Cortinas.

"Hay mucho para hacer, -dijo en la nota- cosas de todos los días como arreglar e iluminar nuestras calles, que el recolector de residuos sea de nuestro municipio y salga por lo menos tres veces a la semana, formar una cuadrilla permanente que se encargue de la limpieza de cunetas veredas y podas, un espacio físico para el adulto donde puedan ir a entretenerse con diversas actividades, solicitar un camión con tanque para que realice el servicio de barométrica y de esta manera el tractor quede a la orden para cortar pasto, recoger desperdicios en las calles. etcétera. Estas son algunas de las inquietudes de los vecinos y mía propia y si la comunidad con su voto me lo permite lucharemos todos juntos para hacerlo realidad”.

Entre las seis y las siete horas de hace pocos días, fue encontrada muerta dentro de su local de trabajo.

Encontrar el local cerrado a las 6 y 5 horas, sorprendió al guarda y al chofer del ómnibus de Cotmi que pasó por Cortinas. Sus empleadores indicaron que Graciela era una persona muy puntual, que jamás se dormía.

En el lugar hallaron dinero, por lo que en principio la Policía se inclinó a pensar que el asesino podría salir de su círculo íntimo.

Olase era madre de cuatro hijos, dos en cada matrimonio. Actualmente se encontraba separada y mantenía una relación sentimental con una persona residente en Montevideo.

El cuadro en el interior del edificio era "dantesco", según expresaron los propios investigadores del caso. El ataque fue tan violento y con tanta saña que sorprendió incluso a la Policía y al médico forense ni bien pisaron el lugar.

Fue ultimada con un elemento contundente, con el que la golpearon reiteradas veces, en la cabeza, la cara y en otras partes del cuerpo. La víctima fue hallada en medio de un charco de sangre.

"El que hizo esto no es un asesino común, no lo hizo una persona, lo hizo un animal", graficó un familiar de la víctima, que pidió no ser identificado.

Esa percepción fue compartida por el comisario a cargo de la investigación, al señalar que se percibió un panorama "sumamente violento, con características de mucha violencia".

El caso, según reconocieron fuentes policiales, se tornó enigmático. Por ahora, se desconoce el móvil del crimen, pero NO se descarta que haya sido "pasional", porque al parecer el o los atacantes no habrían robado nada del lugar.

Por su parte, el comisario de la Seccional 9a de Ismael Cortinas, Juan Chanquet, dijo que fueron indagadas más de 20 personas de la localidad, entre ellos el ex esposo de Olase y que los investigadores esperaban hablar con el individuo luego de que finalizara la audiencia en la sede judicial.

Las declaraciones del entorno de la víctima han sido escuetas.


La primera pista de los investigadores se volcó a la captura de la actual pareja de Olase, quien radica en Montevideo y tiene antecedentes penales por hechos de violencia. El hombre estuvo "desaparecido" unas horas hasta que fue capturado y puesto a disposición de la Justicia.
SEGUIMIENTO:
El hombre radicado en Montevideo, expareja de Graciela Olase  es el único detenido hasta el momento por este caso.

Este individuo prestó declaraciones el 2 de Octubre de este año,  por espacio de dos horas ante el juez Eduardo Tedesca. Sus declaraciones podrían desatar algunos cabos sueltos en la investigación.

Esta persona fue conducida hacia Flores para ser interrogado por la Policía y el juez de la causa.

No obstante, existe cautela dado que también hay otras líneas e investigación. Uno de los detenidos fue la anterior pareja de la fallecida, padre de sus hijos más chicos.

Sin embargo, la forma en que quedó dispuesta la escena del crimen indica que se trata de un caso de violencia doméstica.

Fuentes:




Jennifer y su abuela, doña Argentina

Ocho años. Jennifer Melissa Castañaza Juárez cumpliría nueve hace algunos días. Y los cumplió, pero en el cementerio. Junto con su abuela, Argentina de Paz de Castañaza, fue asesinada.

NOMBRES DE LAS VÍCTIMAS:
Niña: Jennifer Melissa Castañaza Juárez
Abuela: Argentina de Paz

VICTIMARIO:
Jefrey Emmanuel Castañaza Romero

LUGAR DE LOS HECHOS:
Guatemala

HECHOS:
Ana Lorena Juárez, madre de la menor, se presentó en una estación de radio y narró el drama y dolor que le causó no saber de su hija.

Mayor fue su pena cuando la encontró muerta junto a la abuela. Ahora exige justicia para que el responsable sea capturado.

Juárez explicó que hace cinco años su esposo fue asesinado y no se sabe todavía ni por qué, menos quién lo hizo. Era el padre de Jennifer. Desde entonces Jennifer se quedaba en casa de su abuela todos los viernes, y el sábado regresaba a su residencia.

Ana Lorena, viuda, madre soltera; ayudada sólo por su suegra, doña Argentina.

El 3 de septiembre, al no tener información de su hija, fue a buscarla a casa de la abuela, en la colonia Kaminal Juyú, zona 7, donde las halló muertas.

“Al abrir el portón del garaje, la puerta de la casa estaba de par en par, y a ellas las encontré en un mar de sangre”, relató Juárez.

En la entrevista, Ana Lorena describe, llora, solloza, lamenta; quiere gritar y unas abundantes lágrimas cubren su rostro, mientras enseña un cuaderno con un dibujo de arcoiris sobre el cual Jennifer escribió cuánto la amaba. Foto de ese dibujo es el que identifica el perfil de ella en Facebook.

A Jennifer le deshicieron la carita. “Con una cosa de bronce”, explica, “le deshicieron la carita a mi niña…”. Silencio. Indignación. “A la abuela la apuñalaron”.

Hubo violación, según consta en la orden de captura contra el principal sospechoso Jefrey Emmanuel Castañaza Romero.

“Jefrey”, de 25 años, el de la “orden de aprehensión”, era también nieto de doña Argentina, y primo de la niña Jennifer; de hecho, él es el principal sospechoso porque esa noche de viernes, según relata doña Ana Lorena, los vecinos de la casa de “la abuela” escucharon una discusión, en la cual también estaba presuntamente involucrado el padre de “Jefrey”. Más tarde sólo vieron salir el carro de doña Argentina. “Jefrey” vivía temporalmente en esa casa.

El acusado, según el relato de doña Ana Lorena, tiene problema de drogas, pero ella también señala que la crianza del prófugo fue problemática, insistiendo en la irresponsabilidad paterna.


SEGUIMIENTO:
Las autoridades buscan desde el 6 de septiembre de este año a Jefrey Emmanuel Castañaza Juárez, presunto responsable de la muerte violenta de María Élida Argentina de Paz , de 68 años, y Jennifer Melisa Castañeda Juárez, quien hubiera cumplido 9 años el domingo último —abuela y prima del sindicado—.

Según investigaciones que constan en el expediente 01071-2011-00799 del Juzgado Undécimo, Castañaza Juárez,  habría violado a su prima y, luego, ultimado a ambas a cuchilladas, y a golpes, con una figura de bronce.

En el expediente consta que la noche del 2 de septiembre, en la casa de De Paz, se produjo una discusión entre Castañaza Juárez y su papá. Al día siguiente, el primero, quien se drogó, violó a su prima y, cuando fue descubierto por la abuela, las mató a ambas.


Castañaza Juárez se bañó y cambió de ropa antes de salir de la vivienda. Vecinos solo recuerdan cuando se fue de la casa en su automóvil.

En la escena los peritos localizaron evidencia de la violación, del consumo de droga y del crimen. El automotor apareció abandonado en la ruta a El Salvador, dos días después.

Fiscales del MP hicieron un allanamiento en San Lucas Sacatepéquez, para capturar a Castañaza Juárez, pero este no fue localizado. Es sindicado de violación y femicidio. “Yo lo único que pido es justicia. Que lo encuentren y lo castiguen”, dijo Juárez.

VIDEO DE LA ENTREVISTA A LA MADRE DE JENNIFER:

PERFIL EN FACEBOOK DEL "PRESUNTO" ASESINO:



Fuentes:

Esther


Esther Ortí desapareció el pasado jueves 15 de Septiembre en Vinaròs, aunque su familia no dio parte a las autoridades hasta un día después. A pesar de que la víctima jamás había denunciado a su marido por malos tratos, los agentes encargados de la investigación sospecharon de él desde un principio.

La fallecida y el presunto asesino llevaban 14 años casados. En el entorno de la mujer aseguraron que, a pesar de que ella nunca denunció haber sido objeto de malos tratos, sí había reconocido que discutían en multitud de ocasiones. Estas mismas fuentes manejan la hipótesis de que el detonante del crimen fueran los celos que sufría su pareja, hoy, su asesino.

El presunto asesino había levantado previamente parte de la pared donde escondió luego el cadáver de Esther.

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:

Esther Ortí

VICTIMARIO:

José Juan García

LUGAR DE LOS HECHOS:

España

HECHOS:

Esther y José Juan llevaban 14 años casados. Él estaba divorciado de su primera esposa y tenía dos hijos. La relación entre ambos era aparentemente normal, pese a que los allegados a la víctima confirmaron que él “había reconocido en más de una ocasión que discutían”. Esther era una mujer alegre y optimista.
Según fuentes cercanas al caso, “el deseo del detenido de querer dominar a su mujer, y los celos, desencadenaron el crimen”.

Murió asfixiada, probablemente, con un cable. Ésa es la conclusión que han sacado los forenses del Instituto de Medicina Legal de Tortosa respecto al asesinato de la vecina de Esther Ortí, de 47 años, cuyo cadáver fue hallado emparedado en la habitación de una casa de la localidad catalana, propiedad de los padres de su marido, ahora detenido tras confesar ante la Guardia Civil la autoría del crimen.

Tal y como manifiestan fuentes cercanas al caso, la mujer falleció a causa de una asfixia severa y, además, le habían causado graves heridas tanto en el cuello como en la cabeza.

El individuo confesó los hechos y a mediodía del domingo 18 de septiembre, se descubrió el cuerpo, por lo que el hombre será juzgado por el magistrado responsable del juzgado de Instrucción número 4 de Vinaròs.

La mujer desapareció el pasado jueves, aunque su familia no dio parte a las autoridades hasta un día después. A pesar de que la víctima jamás había denunciado a su marido por malos tratos, los agentes encargados de la investigación sospecharon de él desde un principio.

Según el relato de los hechos efectuado por el ahora detenido ante la Guardia Civil, el asesinato se perpetró en el almacén que tenían en la calle Poniente de Vinaròs -a escasos 50 metros del domicilio conyugal-, donde habían quedado con anterioridad.

Para evitar ser descubierto, trasladó el cuerpo en coche hasta la casa de campo que su familia poseía en la vecina provincia de Tarragona y lo ocultó tras una pared de ladrillos que él mismo levantó y repintó instantes después.

La muerte de Esther Ortí ha conmocionado a todos los vecinos de la localidad. Ya cuando el presunto responsable de estos hechos tuvo que ir junto a la Guardia Civil a inspeccionar del domicilio de la fallecida, los agentes tuvieron que organizar un fuerte dispositivo de seguridad para evitar problemas. Algún vecino incluso se abalanzó sobre el vehículo que trasladaba al hombre.

El esposo lo tenía todo planeado:

Lo tenía, al parecer, todo planeado: el lugar, la hora, el arma e incluso dónde iba a esconder el cadáver. José Juan García, presunto asesino de Esther Ortí, levantó parte de la pared donde ocultó el cuerpo sin vida de su esposa --en una casa familiar de Amposta-- unos días antes de cometer, supuestamente, el terrible asesinato, “con absoluta sangre fría” movido, como confesó, por un “ataque de celos”.

El presunto asesino manifestó “una sangre fría escalofriante”. Así revelaron algunos testigos cercanos: “Cuando desapareció Esther, la familia interpuso la denuncia el viernes y comenzaron a hacer carteles para repartirlos por toda la localidad con el fin de encontrarla. Él, en cambio, estuvo todo el viernes junto a ellos, sin moverse de la casa, diciendo que no sabía a dónde buscarla, ni qué podía haberle pasado... Fingiendo como un actor, simulando estar afectado”. Y añadieron: “Mientras, las hermanas y cuñados de Esther le animaban a él, le prestaban su apoyo... Pese a que la Guardia Civil ya les advirtió de que él podía ser el sospechoso y que actuasen con normalidad, nunca pudieron imaginar que estaban junto a un cruel asesino sin escrúpulos”.

Premeditación:

Según fuentes cercanas al caso, José Juan, con conocimientos de albañilería, “acudió con anterioridad al crimen hasta una casa que sus padres tienen en Amposta, cerca de la playa Eucaliptus”. Allí, manifestaron, “construyó en una de las habitaciones una pared que dejó a medio terminar”. Las últimas personas que vieron a Esther con vida fueron su hermana Pilar y una amiga. Fue a esta última a quien Esther confesó que no se iba directamente a casa, sino que pasaría antes por el almacén de la calle Prolongación Trabal, a 50 metros del domicilio conyugal de la calle San Francisco, a donde había quedado con su marido. Y allí le perdieron la pista.

Su marido, presuntamente, la mató en el almacén. La autopsia reveló, según fuentes fidedignas, que el cuerpo presentaba “un golpe en la cabeza” y fue acuchillada con un objeto punzante. Tras el crimen emparedó el cadaver, y terminó de construir la pared, con todo y pintura.

SEGUIMIENTO:
El informe de la autopsia que practicaron los forenses del Instituto de Medicina Legal de Tortosa desvela que Esther fue estrangulada supuestamente con un cable y murió como consecuencia de una asfixia severa. Además, presentaba graves heridas en el cuello y en la cabeza.

El juez de Instrucción número 4 de Vinaròs abrió una causa contra el marido de Esther, José Juan García, que fue detenido por la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de Castellón en la noche del sábado ante las sospechas de que fuera él el autor. Fue el domingo por la mañana, después de ser sometido a constantes interrogatorios en el cuartel, cuando José Juan, más conocido por todos como Pepe, se derrumbó y confesó el crimen, tal y como explicaron fuentes cercanas al caso. A mediodía, la Guardia Civil descubría el cadáver. Esther, quien  había sido emparedada en una habitación de una casa ubicada en Amposta y que es propiedad de los padres del arrestado.

Los allegados indicaron aquel día que “Esther se iba a casa, pero dijo que había quedado con su marido en el almacén”. Fue allí, a 50 metros del domicilio conyugal, donde, presuntamente la estranguló y la asesinó, propinándole golpes. Después la tiró en un hueco de una pared previamente levantada y después acabó de construir la estructura, la lució con cemento y la pintó.

El acusado será sometido a un programa de tratamiento para agresores dentro de la cárcel.

Fuentes:
http://www.elperiodicomediterraneo.com/noticias/sucesos/el-acusado-de-asesinar-a-su-mujer-en-vinaros-planifico-crimen-dias-antes_685681.html
http://www.lasprovincias.es/v/20110923/castellon/autopsia-revela-esther-orti-20110923.html
http://www.elperiodicomediterraneo.com/noticias/sucesos/la-autopsia-desvela-que-esther-fue-estrangulada-y-fallecio-por-asfixia_686174.html
http://www.lasprovincias.es/v/20110920/castellon/detenido-vinaros-confiesa-mato-20110920.html

Rubí y Marisela

Hija y madre asesinadas arteramente. Hoy son un símbolo de la asquerosa impunidad prevaleciente en este país.

Rubí tenía 14 años cuando se enamoró de Sergio Rafael Barraza Bocanegra. Entonces no sabía que ese sentimiento la llevaría a la muerte.


NOMBRES DE LAS VÍCTIMAS:
Rubí Marisol frayre Escobedo y Marisela Escobedo Ortiz

VICTIMARIO:

Sergio Rafael Barraza Bocanegra

LUGAR DE LOS HECHOS:

Cd. Juárez, Chihuahua

HECHOS:
Rubí y Sergio se casaron. El matrimonio duró dos años, tiempo en el que la adolescente vivió un infierno, pues “el amor de su vida” no sólo la apartó de su familia y amigos, sino que la golpeaba cobardemente. El miedo era constante... estaba atrapada.

El 28 de agosto de 2008, Barraza Bocanegra la asesinó, le prendió fuego y la tiró en un basurero clandestino en Ciudad Juárez Chihuahua. De acuerdo a lo dicho por Barranza, él victimó a su mujer y la dejó cerca de unas "marraneras" y la incineró. Luego de ser arrestado aceptó haber cometido el crimen e incluso llevó a varios agentes policiacos hasta el lugar en el que prendió fuego al cuerpo.

Rubí Marisol Frayre Escobedo, de 17 años, desapareció en agosto de 2008 y fue hasta enero de 2009 cuando su madre, Marisela Escobedo Ortíz, presentó una denuncia contra Sergio Rafael Barraza Bocanegra, pareja de su hija.

El caso indignó a la sociedad Chihuahuense, sobre todo porque en un juicio oral, Sergio Rafael confesó y pidió perdón por matar a Rubí Marisol. Aun así, los jueces Catalina Ochoa Contreras (Presidenta), Netzahualcóyotl Zuñiga Vazquez (redactor) y Rafael Boudid (tercer integrante) decidieron que no encontraron elementos para inculparlo, por considerar la declaración insuficiente para demostrar su culpabilidad.

La confesión se perdió en los elementos que utilizaron los jueces, pesó más que el Ministerio Público no hubiera presentado pruebas contundentes para dar una sentencia de culpable a Sergio Barraza. Otro argumento del trío polémico fue que la Procuraduría de Justicia del Estado de Chihuahua no comprobó ni la causa de la muerte de Rubí Marisol, ni que el asesino fuera su esposo.

Durante el proceso, la familia de Rubí reunió y aportó pruebas y testimonios sobre la agresión de Barraza contra la menor.

"Los jueces no quieren hacer válida la confesión de este asesino porque no la hizo durante el juicio oral, sin embargo, existen muchos testigos declarados que afirman que fue él quien la mató y así lo confesó días después de cometer el asesinato", declaró Marisela.

En el proceso, Barraza estuvo en prisión durante un año en espera del juicio y pidió perdón a Escobedo por el daño provocado por la muerte de su hija.

Después de la resolución, Marisela Escobedo declaró que los jueces tenían suficiente material para dar la pena máxima al homicida; sin embargo con la sentencia de libertad "se pone en evidencia la ineficacia de los magistrados".

"Es igual a que me hubieran matado dos veces a mi hija", manifestó la madre en ese momento.

Durante el juicio se consideró que la confesión del asesino carecía de validez probatoria y fue dejado en libertad.

Poco después, la sentencia absolutoria fue apelada, un tribunal lo consideró culpable y lo sentenció. Determinaron  que se equivocaron y que existían suficientes elementos para ejecutar una sentencia de 50 años en prisión. Era demasiado tarde, el acusado estaba prófugo.

Marisela Escobedo realizó una investigación por su cuenta y logró ubicar a Barraza en Fresnillo, Zacatecas, pero al no recibir apoyo de las autoridades, de nuevo logró escapar. Por la mente de la dolida madre pasó la idea de ir ella misma, acompañada de otras mujeres, a llevar a cabo un arresto ciudadano del asesino de su hija; un Fiscal le aseguró que lo arrestarían pronto, que no se arriesgara. La autoridad ya había determinado ofrecer una recompensa de 250 mil pesos por Barraza Bocanegra.

Marisela Escobedo declaró a El Diario de Juárez que familiares de Barraza, asesino de su hija, la amenazaron a causa de las investigaciones que realizaba sobre el caso.

Sin embargo, en Diciembre de 2010, Marisela Escobedo fue asesinada frente al Palacio de Gobierno, sede de la administración local, mientras colocaba una manta para exigir justicia por el homicidio de su hija.

La mujer tenía dos semanas manifestándose en el edificio gubernamental.

Alrededor de las 20:00 hora local, un hombre se le acercó y disparó a quemarropa en la cabeza.

Fue trasladada con vida a una clínica cercana, donde perdió la vida minutos después, confirmó la Fiscalía Estatal.

La señora Escobedo se convirtió en una importante activista luego de que el homicida confeso de su hija, Rubí Marisol Frayre Escobedo, fuera puesto en libertad.

Días antes de su muerte,  se manifestó en un evento en el que se encontraba el gobernador César Duarte, en una gran manta plasmó su inconformidad por el hecho de que fuera aprendido el asesino de un sobrino del funcionario a solo cuatro meses de que cometió el crimen y además fuera sentenciado en menos de una semana.

"Justicia: privilegio del gobernador. ¿y para mi hija cuando?", señalaba un letrero que colocó frente al Palacio, antes de ser asesinada.


SEGUIMIENTO:
Sergio Rafael Barraza Bocanegra es el principal sospechoso de la muerte de Marisela, ya que es él el acusado de ultimar la vida de Rubí.

Ahora que ella ha muerto el gobernador de chihuahua, César Duarte, afirmó que no tiene duda de que la ejecución de la activista Marisela Escobedo fue por venganza del criminal. Lamentó la muerte de la madre de Rubí, quien “siempre señaló al autor material de la muerte de su hija y que desgraciadamente fue liberado por tres jueces, que insolentemente lo pusieron en libertad”.

El gobernador declaró que solicitó al Congreso de Chihuahua que estos jueces sean separados del cargo para que sean juzgados por las omisiones y el uso indebido de poder en el que liberaron a un sujeto peligroso, confeso de asesinato.

El gobierno de Chihuahua jamás ofreció medidas cautelares a Marisela, a pesar de la evidencia sobre las amenazas de muerte que recaían sobre ella, a pesar de que testificó en el juicio. Marisela intuía que podría perder la vida, y hacía lo que estaba en sus manos para evitarlo; sin embargo nunca estuvo dispuesta a darse por vencida, murió intentando salvar a otras adolescentes de una muerte como la de su hija, creyendo, hasta el último día, que las Instituciones judiciales de su país la acompañarán en una batalla colectiva por la justicia y la vida de las mujeres.

Tres jueces tuvieron la posibilidad de hacer justicia en un feminicidio, pero su ineficacia expone la sombra de la impunidad con dos crímenes y un asesino en plena libertad... Solo queda una ola de sufrimiento,de  indignación y de frustración.
Fuentes:




Fátima

Se trata de una joven de 24 años quien murió tras sufrir quemaduras en el 90 por ciento de su cuerpo y luego de protagonizar una discusión con su novio en agosto del año pasado.

El 18 Agosto del 2010, Fátima Catán con solo 24 años de edad (con un embarazo de 2 meses y toda una vida por delante). Fue rociada con alcohol y prendida fuego, por el asesino Martín Santillan, quien fue su pareja durante cuatro años. A causa de esto, fallece el 22 de agosto en el Instituto del Quemado de La Plata, con el 85% de su cuerpo afectado.

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:

Fátima Catán

VICTIMARIO:

Gustavo Martín Santillán

LUGAR DE LOS HECHOS:

Argentina

HECHOS:

El hecho tuvo lugar a mediados de agosto de 2010, en la vivienda que Fátima compartía con su pareja ubicada en la calle Murature al 600, de Villa Fiorito, luego de una discusión que tuvieron ambos, porque presuntamente ella se resistía a continuar con la relación.

En ese lugar vivían la joven santiagueña Fátima y su pareja, Gustavo Martín Santillán. En horas de la tarde, Fátima, de 24 años de edad, sufrió quemaduras en diferentes partes del cuerpo y su pareja se encargó de trasladarla hacia el hospital de la zona.

La mujer fue internada en un primer momento en el Hospital Evita, de Lanús, donde se le diagnosticó que sufrió quemaduras en el 88 por ciento de su cuerpo. La directora del sanatorio, María del Carmen Vivere, coincidió con los padres de la joven al indicar que fue víctima de un “hecho de violencia”.

Fátima ingresó con más del 85 por ciento de su cuerpo con quemaduras al Hospital Evita, de Lanús, pero por la complejidad del caso, a los pocos días fue trasladada en helicóptero al Hospital San Martín de La Plata, especializado en el tratamiento de pacientes quemados.

Pero luego de cinco días de internación y ante la gravedad de las quemaduras, las cuales abundaba en la zona del cuello y abdomen, Fátima falleció.

Gustavo Martín Santillán huyó del hospital después de internar a Fátima, sin heridas, sin explicaciones, repitiendo que ella estaba celosa y que por eso se prendió fuego. Después de cuatro días de agonía, la santiagueña Fátima murió.

Unos meses antes de la muerte, Fátima apareció en su casa llena de sangre: Santillán la había golpeado a puño cerrado en la cara. Volvió con su cama de dos plazas para instalarse de nuevo con su familia. Su madre hizo una denuncia, pero Fátima no quiso ratificarla en sede judicial y la misma se cajoneó. Su madre le pidió por favor a su hija que no volviera con Santillán.

“Él volvió borracho de un asado, la golpeó, la tiró al piso y la prendió fuego. Mi hija vivía amenazada por él”, aseguró su padre.

Hace un año y medio, Santillán le había propinado una feroz golpiza a Fátima, que terminó con una costilla y un labio rotos. A pesar de la denuncia de los padres de Fátima la fiscal Nicoletti y su par Ramiro Varangot no dispusieron ninguna detención ni indagatoria.

El padre de la víctima, Jesús Catán, reiteró esta mañana su denuncia sobre la culpabilidad de Santillán en la muerte de Fátima.

Ella sufrió en reiteradas ocasiones hechos de violencia física y psicológica por parte de quien fue su pareja. La investigación de la causa está a cargo de la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) 6 de Lomas de Zamora al frente de Ramiro Varangot, y caratulada como “averiguación de ilícito”, por lo que las hipótesis que giran en torno al hecho son tres: pudo haber sido un asesinato, un suicidio o un accidente.

El mismo día del hecho, el novio se presentó en una comisaría y dio su versión de los hechos, en los cuales recordó que Fátima le reprochó estar ausente unos tres días en la vivienda, y que ella se prendió fuego accidentalmente con alcohol de quemar.

Luego del hecho, vecinos y la familia de Fátima recordó que el sospechoso había tenido antecedentes de violencia hacia la joven, y que en ocasiones la había golpeado.


SEGUIMIENTO:
El próximo 22 de septiembre de 2011, y a más de un año de su muerte, la Justicia ordenó la reconstrucción del hecho que tuvo como víctima a la joven Fátima Guadalupe Catán, quien murió en agosto del año pasado luego de protagonizar una discusión con su novio en la vivienda que ambos compartían en la localidad de Lomas de Zamora.

La medida había sido pedida por la familia de la joven víctima, quien al momento del hecho tenía 24 años y contaba con un embarazo, la cual sigue acusando e insistiendo con la indagatoria del novio de su hija, Martín Santillán, de 31 años.

Hasta el momento, los fiscales Andrea Nicoletti y Ramiro Varangot no dispusieron su detención ni tampoco su declaración indagatoria, y por ello se intenta determinar si el hecho fue accidental o bien está involucrada la pareja de la víctima.

Según las fuentes consultadas, en la reconstrucción prevista para el 22 de septiembre, intentarán que el novio explique cómo se dieron los hechos, por lo que fue convocado para tal fin.

Hasta el momento, el joven es sólo un testigo en la causa, donde se siguen al menos dos hipótesis: que la chica se haya autoprovocado las heridas, o que haya sido agredida por una segunda persona. De todos modos, su familia sostiene que fue víctima de una caso de “violencia doméstica” y apuntan directo contra Santillán a quien antes de la tragedia ya habían denunciado “porque la agredía”.

Estefanía Zamudio, amiga de Fátima hace muchos años detalló: “La relación entre Fátima y Martín siempre fue violenta. Hacía tiempo que ella recibía golpes, incluso Elsa, la mamá de Fátima tiene en su casa un colchón de su hija lleno de sangre. De hecho Fátima se separó varias veces, pero él la perseguía y ella terminaba volviendo”.

“Fátima no era un pájaro, era una persona con madre, padre, hermano, primos y tíos. No era una cosa sin importancia. Necesitamos saber qué pasó”, sostuvo su desolada madre.

“Extraño mucho a mi hija, y me siento muy mal porque no pude hacer nada para encerrar al criminal que mató a mi nieto y a ella. Pasó un año y sigo pasando un calvario, pero también continúo luchando para saber la verdad”, concluyó.

Fuentes:


Alí

Alí Desirée cumplió 24 años el 20 de septiembre, estaba a punto de graduarse en Letras Clásicas de la UNAM, emocionada con la idea de convertirse en escritora (ya había publicado algunos poemas), esta campeona ajedrecista, hija de madre mexicana y padre panameño, celebró su vigésimo cuarto cumpleaños con Osvaldo Morgan Colón, su ex novio, con quien había terminado dos semanas antes. Osvaldo le pidió que siguieran siendo amigos, ella aceptó. 

Luego de la fiesta, Osvaldo asesinó a Alí de 25 puñaladas y, asustado, buscó a un amigo para confesarle el crimen. 

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:
Alí  Dessiré Castrejón Cuevas

VICTIMARIO:
Osvaldo Morgan Colón

LUGAR DE LOS HECHOS:
Ciudad de México

HECHOS:
Pasaba el medio día del 20 de septiembre de 2009. El cuerpo de Alí Castrejón Cuevas yacía inerte en la cocina del departamento de su exnovio, Osvaldo Morgan Colón. La fiesta de cumpleaños que éste le organizó en la calle de Ayuntamiento, en el centro de la ciudad de México, había terminado. 


—Alex, Alex –la súplica desesperada de Osvaldo lo despertó–. ¡Maté a Alí: ya les había dicho que algo así iba a pasar! 

Las rodillas, ya sin fuerza, cayeron sobre el piso de la recámara. El cuchillo ensangrentado en una de las manos confirmaba las palabras del joven. 

—Llama a una patrulla… No, mejor no… Mejor sí… Tranquilo, tranquilo –las palmadas sobre el hombro llamaban a la cordura. Luego vendría el intento de suicidio. 

—¡Por qué no me muero! ¡Ya no tengo salvación, verdad! 

Alejandro recuerda la imagen de su amigo cortando varias partes de sus antebrazos, según su testimonio integrado al expediente de la causa penal 285/09, radicada en el Juzgado 39 de lo Penal del Distrito Federal. 

Alí apenas había cumplido 24 años cuando fue asesinada por el hombre que decía amarla. Las 26 puñaladas en su vientre, cuello y rostro mostraron la crueldad del episodio, que fue calificado por algunos diarios como “crimen pasional”. 

Algunos amigos han dicho que era “celoso, pero normal”, “controlador, pero lo normal”, “quería que Alí le obedeciera, como es normal”, “un muchacho tranquilo, pero con arranques de ira (normales)”. Lo cierto es que, según amigas de la joven asesinada, Alí terminó la relación porque él tenía “ataques de celos incontrolables”. Durante la relación, las alarmas de la violencia salieron a la luz y nadie lo tomó en serio. Incluso después de muerta, la familia de él la culpó de haber “provocado la discusión que lo hizo enojar”. 


Familiares y amigos de Castrejón Cuevas –feminista, poeta y estudiante universitaria– asumen que el feminicidio sucedió como narra Alejandro en su testimonio. Además de justicia, buscan “que el caso sea ejemplar”: se trata de “sensibilizar a la gente”; que sen den cuenta que no es un problema exclusivo de Ciudad Juárez, “que a cualquiera le puede pasar”. 



Alí, un asesinato con saña y alevosía: 
“El caso de Alí engloba perfectamente lo que es la evidencia tan contundente de la saña; y a la vez, el no reconocimiento de esa evidencia”, asegura Berlanga, integrante del colectivo Alí Somos Todas, constituido a raíz del asesinato de la joven. 

“Hasta podríamos decir que es un crimen alevoso”, se pronuncia José Mario Nájera, médico legista guatemalteco. Al propinar 26 heridas con arma blanca “me estoy asegurando del acto que estoy haciendo” y de que “la víctima no oponga resistencia: eso se llama alevosía", explica. 

“Uno no tiene que ahondar mucho en las diferencias físicas y anatómicas entre un hombre y una mujer” para reconocer que existe “una relación desigual de poder” entre ambos: “Son cuestiones de pura lógica”, argumentan sus defensores para rebatir la tesis de “defensa legítima” presentada por los abogados de Osvaldo, quienes afirman que Alí lo atacó primero. 

De los 549 casos de feminicidios documentados por el OCNF en 2009, 70 corresponden a homicidios perpetrados por familiares y/o parejas, como en el caso de Alí. Las investigaciones de esta organización apuntan que el rango de edad de las víctimas, en México y en Centroamérica, oscila entre los 20 y los 40 años. 

La mayoría de los casos permanece en la impunidad. 

SEGUIMIENTO: 
Aunque el hermano del joven asesino, Humberto Morgan (ex diputado de la Asamblea Legislativa) ha intentado que se exonere a Osvaldo, el Poder Judicial del DF impuso una sentencia de 42 años de prisión por homicidio calificado con saña (crueldad) y alteración voluntaria (presencia residual de drogas en la sangre). 

En el expediente quedó asentado que el 19 de septiembre pasado Osvaldo Morgan organizó una fiesta de cumpleaños para Alí, a la cual asistieron amistades de ambos. La mañana posterior a la celebración, Morgan despertó a uno de sus amigos, Alejandro Rangel Ruedas, quien se quedó a dormir en el departamento. 

En su declaración ministerial, Rangel Ruedas, testigo principal, señala que: 

“Como a las 12:10 horas del día 20 de septiembre de 2009, escuchó la voz de Osvaldo que le decía: Alex, Alex, escucha la voz y se despierta, ve de frente a este Osvaldo Aristóteles quien tenía en una de sus manos sin saber qué mano pero traía un cuchillo con mango de color café de los llamados de cocina y ve que su amigo Osvaldo Artistóteles cae al suelo de rodillas y en ese momento su amigo Osvaldo Aristóteles le dice maté a Alí, ya les había dicho que algo así iba a pasar, llama a una patrulla, no mejor no, mejor sí”. 

Asimismo, también declaró haber visto a Alí en el piso de la cocina y a Osvaldo Morgan “cortando varias partes de su antebrazo”. El acusado le dijo: “por qué no me muero” y “ya no tengo salvación verdad”. 

De acuerdo con el expediente, al departamento que Osvaldo compartía con otras tres personas llegaron los policías Verónica Trujillo Sarabia y Janner Hernández Santiago. 

En el documento también quedó registrado, según las declaraciones de ambos policías, que “Morgan presentaba varias heridas en el cuerpo, por lo que será trasladado a la Cruz Roja de Polanco”, donde pasó cinco días bajo custodia. El 25 de septiembre le dictaron auto de formal prisión en el Reclusorio Norte acusado de homicidio calificado. 

Actualmente, Osvaldo Morgan Colón está preso en el Reclusorio Norte, procesado por el delito de “homicidio calificado” con las agravantes de “saña y alteración voluntaria” –en su orina se encontraron restos de “alcohol, cannabis y barbitúricos”–, consta en el expediente judicial. 


Como en otros casos de feminicidio, las irregularidades en el proceso y la culpabilización de la víctima están presentes, denuncian integrantes de Alí Somos Todas. “Era inestable emocionalmente, era poliamorosa, tenía problemas familiares…”, son los argumentos presentados por la defensa de Osvaldo. 

El inculpado solicitó un amparo en contra del auto de formal prisión “a pesar de que no existen elementos objetivos para que se lo otorguen”. Familiares y amigos de la víctima se muestran preocupados, pues el hermano de Osvaldo es el exdiputado perredista Humberto Morgan Colón. 

Además de la nacionalidad mexicana, Alí contaba con la nacionalidad panameña. Por ello, la Defensoría del Pueblo de Panamá; el Ministerio de Relaciones Exteriores; la Comisión de Asuntos de la Mujer, Derechos del Niño, la Juventud y la Familia, y la rectoría de la Universidad de Panamá se pronunciaron para que en México se haga justicia. 

Artículo publicado el 14 de marzo de 2011: 
Desde Fundar, Centro de Análisis e Investigación A.C. vemos con preocupación el fallo emitido por el juez de la 4ª Sala en Materia Penal del Distrito Federal que disminuye la pena privativa de libertad a Oswaldo Morgan Colón, responsable de haber cometido el delito de homicidio calificado en contra de Alí Cuevas. Consideramos que este fallo constituye un retroceso a los avances en materia de impartición de justicia en crímenes por violencia de género. 

El fallo evidencia en su argumentación la falta de perspectiva de género pero además, muestra con gravedad la tendencia de algunas autoridades a culpabilizar a la víctima. En este sentido, consideramos que el veredicto emitido por el juez es una forma de revictimización en contra de familiares y amigos de Alí Cuevas y que además, transmite un mensaje pernicioso a la sociedad que justifica la violencia de género como un castigo a la “insubordinación” de las mujeres. 

El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) no es ajeno a ninguno de estos temas. El propio Tribunal ha revelado que, en el marco de la transición hacia un nuevo modelo de Justicia Penal (que tuvo lugar con motivo de las reformas Constitucionales en 2008) así como también en el del Programa de Derechos Humanos del Distrito Federal (PDHDF), se han impulsado procesos de capacitación y profesionalización de jueces y personal administrativo del poder judicial específicamente para el tema de impartición de justicia con enfoque de género y respeto de los derechos humanos de las mujeres. Esta sentencia no es consecuente con lo que el propio Tribunal está informando (ver http://estadistica.tsjdf.gob.mx/portal/docs/informe/derechos_humanos.pdf).

 Finalmente, exigimos que se tomen en cuenta los estándares internacionales en materia de derechos de las mujeres y violencia de género en el caso del feminicidio de Alí Cuevas Castrejón, y que se instrumenten medidas de reparación integral del daño, que incluyan como medidas de no repetición, la sensibilización hacia la sociedad sobre la violencia de género. 

Alí Somos Todas: 
Curiosamente, este caso, como la mayoría de feminicidios, es definido por la gente como “anormal”; pero las cifras demuestran lo contrario. Solamente en el Estado de México, cada dos días es asesinada, al menos, una mujer. Más del 80% de los feminicidios los perpetra un novio, esposo, ex esposo o conocido de la víctima, mientras que la mayoría de muertes violentas de hombres son perpetradas en las calles por otros hombres, no por razones relacionadas con el género o los afectos. 

La muerte de Alí ha despertado un gran interés en hombres jóvenes por entender las razones por las cuales la violencia en el noviazgo aumenta en México (Informe SEP 2009). La organización de hombres contra la violencia: http://www.gendes.org.mx/www.gendes.org.mx, trabaja en ello bajo el principio de que los valores y comportamientos asumidos desde la identidad masculina tradicional, son producto de una construcción social que normaliza esos comportamientos e incluso los celebra o minimiza. Estos expertos aseguran que todo hombre que decida cambiar sus patrones de conducta respecto a las mujeres puede lograrlo, y su trabajo con hombres lo demuestra claramente. 

Alí era una joven feminista, defendía los derechos de las mujeres y niñas. Era amorosa y confiaba en que los hombres, como las mujeres, eligen ejercer violencia o evitarla. Osvaldo eligió asesinarla. 

Ella había escrito un poema que dice: 

En mi jardín en mi quietud 
la mirada imantada llama, 
el silencio se mueve entre las alas 
escúchalo 
como si todas las flores hablaran 
y el cielo abriera su único ojo (el sol) 
no temas a aquel cíclope enorme 
mira fijamente pero dice la verdad”. 

Su legado para los estudiantes de la UNAM podría ser trabajar contra la violencia en el noviazgo y crear un movimiento de nueva masculinidad. Porque el verdadero amor, dice el Facebook de las amigas de Alí, no es violento. 

Fuentes: 





Nadia Alejandra

El 12 de Febrero de 2004, Nadia, con 24 años de edad, fue asesinada frente a sus tres hijos (de 5, 4 y 2 años), por su esposo y su cuñado.

NOMBRE DE LA VÍCTIMA:
Nadia Alejandra Muciño Márquez

VICTIMARIOS:
Bernardo e Isidro López Gutiérrez

LUGAR DE LOS HECHOS:
Villa Nicolás Romero, Estado de México

HECHOS:
En el año de 1997, a la edad de 17 años, mientras estudiaba la carrera técnica de computación, Nadia Alejandra Muciño Márquez conoció a Bernardo López Gutiérrez, de 22 años, quien era conductor de un microbús; comenzaron una relación sentimental y en ese mismo año, el 24 de abril decidieron vivir en unión libre. Un año después de este suceso procrearon a Carlos Rafael, después a José Uriel y dos años después a Fernanda, todos de apellido López Muciño.

Bernardo trabajaba de manera inconstante y no permitía a Nadia trabajar, lo cual producía problemas económicos que ocasionaban discusiones entre la pareja, las cuales culminaban en agresiones y golpes contra Nadia. El 27 de mayo de 2003 Bernardo golpeó y privó de su libertad a Nadia durante seis días, hechos que fueron denunciados por Nadia, quien decide dejar a Bernardo e irse con sus hijos a otra entidad.
Después de tres meses, Bernardo encuentra a Nadia y la convence de regresar, éste comienza a demostrarle un cambio de actitud, hasta que el día 12 de febrero de 2004, Nadia fue asesinada a manos de Bernardo y de Isidro, ambos de apellidos López Gutiérrez. Los pequeños hijos de Nadia, de 5, 4 y 2 años de edad fueron testigos presenciales de los hechos.

Los agresores simularon que Nadia se había suicidado. Vecinos dieron aviso a la señora María Antonia y el señor Rafael -padres de Nadia- quienes se trasladaron a la casa de Nadia, la cual se encontraba como a cinco minutos en auto de su domicilio pero ya no en el municipio de Nicolás Romero sino de Cuautitlán Izcalli. Una vez en el lugar, encontraron la puerta abierta, al entrar, notaron que todo estaba en completo desorden y la televisión estaba prendida. En el baño, cuya entrada sólo estaba cubierta con una cortina, se encontraba Nadia, ya rígida, colgada con un lazo de la viga que sostenía el techo de lámina de cartón.

Como en el caso de la activista Marisela Escobedo que buscó por cuenta propia a los asesinos de su hija, la madre de Nadia Alejandra no cejó hasta ubicar a los responsables, por lo que se integró una averiguación previa por homicidio calificado y se libraron las órdenes de aprehensión contra los hermanos López, de los que sólo se detuvo a Isidro.Pese a la solidez de las pruebas, el 5 de febrero de 2010 los Magistrados del la Primera Sala Colegiada de Tlanepantla absolvieron a Isidro, y descalificaron los testimonios de los hijos de Nadia. La actitud de los magistrados orilló a la señora Márquez demandarlos penalmente.

Su caso quedó impune porque cuando las autoridades levantaron el cuerpo “extraviaron” la cuerda con la que fue asfixiada y se negaron a analizar la sangre encontrada en una camisa y en el lavadero de la vivienda.
Además, los peritos “olvidaron” sellar el lugar de los hechos, lo que le permitió a la familia de los homicidas quemar “toda la evidencia” e incluso cambiar la tapa de una cisterna, donde Bernardo y su hermano introdujeron y golpearon a Nadia, según el relato de sus hijos.

A pesar de comparecer en septiembre de 2007 con 14 testigos de descargo, fue iniciado el proceso penal en contra de ISIDRO LÓPEZ GUTIÉRREZ, a quien, el 8 de octubre del 2009, se le dictó una Sentencia CONDENATORIA por el delito de Homicidio calificado, por el Juez M. D. Felipe Landeros Herrera Juzgado Tercero Penal de Primera Instancia del Distrito judicial de Cuautitlán Izcalli.

Después de seis años en busca de justicia, María Antonia Márquez, madre de Nadia, consiguió que Isidro fuera sentenciado a 42 años de prisión por este delito a finales de 2009; él apeló la condena en febrero pasado y dos meses más tarde fue puesto en libertad. Bernardo sigue prófugo.

A finales de 2010 el caso fue presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

El asesinato de Nadia Alejandra forma parte de esos 9 de cada 10 homicidios de mujeres que quedan impunes en el Estado de México.


SEGUIMIENTO:
 Las irregularidades perpetradas en este caso se dan desde el levantamiento de cadáver, ya que las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México omitieron recabar las pruebas; en la averiguación previa no existe constancia de que hubiera aseguramiento del área del lugar de los hechos, no se señala aseguramiento de objetos, ni se sacan fotografías del lugar -a excepción de las del cuerpo de Nadia-, concretándose únicamente a la descripción de la escena y al levantamiento del cadáver.

Al marcharse, las autoridades no cerraron la puerta, no resguardaron el lugar, tampoco hicieron una inspección completa del lugar ni recolectaron evidencia, mucho menos tomaron fotografías del lugar; por lo que el día 26 de febrero de 2004, se realizó una ampliación de Inspección Ministerial, por lo cual, autoridades de la Procuraduría se trasladaron al lugar de los hechos, diligencia que no pudo ser completada por no haber ingresado a la casa debido a que la chapa había sido cambiada, no obstante, en esta diligencia se pudo constatar desde el exterior que el inmueble se encontraba vacío; asimismo, encontraron indicios de objetos quemados, entre ellos un cochón individual, trastes de cocina, objetos personales de vestir, zapatos, cuadernos, y un trozo de cuerda color amarillo con azul el cual se encuentra quemado mismo que levantaron para integrarlo en la indagatoria; de igual forma encontraron una sustancia color café en el lavadero, de la cual recabaron una muestra para su estudio; finalmente, al entrevistar a la vecina que tuvo a los niños la noche del 12 de febrero de 2004, ésta entregó a las autoridades una camisa que tomó del lugar de los hechos para cubrir a la niña, prenda que presentaba manchas color rojizo, por lo que se ordenó el aseguramiento de la misma y más adelante se determina la presencia de sangre pero no se analizan por ser muestras insuficientes.

A pesar de las irregularidades y de las violaciones al debido proceso en la jurisdicción mexicana, el Ministerio Público, consignó la averiguación previa el 9 de agosto de 2005, por el delito de HOMICIDIO en contra de Bernardo López Gutiérrez y de Isidro López Gutiérrez, alias "el Matute", cometido en agravio de Nadia Alejandra Muciño Márquez.

Sin embargo, en fecha 5 de Febrero del 2010, fue emitida otra Resolución en el Recurso de Apelación, en la cual se modificó la de Primera instancia, la cual decidió que "Al no acreditarse el cuerpo del delito, lo procedente es dictar a favor de Isidro López Gutiérrez, SENTENCIA ABSOLUTORIA", ordenando su inmediata libertad; lo anterior sin una adecuada fundamentación y motivación y sin una correcta e integral valoración de las pruebas.

Si bien existió un proceso penal en contra de Isidro López Gutiérrez, éste fue absuelto por la ineptitud de los Magistrados de la Primera Sala Colegiada Penal de Talnepantla, Estado de México, mientras que Bernardo López Gutiérrez, quien a pesar de tener una orden de aprehensión desde el año de 2005, nunca ha sido juzgado.

Las omisiones y acciones que constituyeron irregularidades en el procedimiento, motivaron que, el 5 de octubre de 2010, la CMDPDH y la ODI presentara una Petición ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, por las violaciones a los derechos humanos cometidas por el Estado mexicano en perjuicio de Nadia Alejandra Muciño Márquez y su familia.

Sergio Méndez Silva, abogado de la CMDPDH destacó que todo el procedimiento estuvo “plagado de irregularidades”, pues mientras las autoridades modificaron la escena del crimen y destruyeron pruebas, a la defensa se le negó la integración de más elementos contra los responsables del crimen. “El de Nadia es un caso emblemático de la negligencia del Estado de México para proteger a las mujeres; y de la denegación de justicia, que no es otra cosa que mantener en plena impunidad un feminicidio que ocurrió hace siete años; que se libraron órdenes de aprehensión desde hace seis, en el que sólo se consignó a uno de los responsables, para después absolverlo, mientras que el otro culpable, el esposo de Nadia, está libre sin que hasta la fecha las autoridades hagan algo por detenerlo”.

El pasado 3 de agosto, María Antonia Márquez y abogados de la CMDPDH y la ODDI demandaron ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de México a los magistrados que ordenaron la libertad de Isidro López Gutiérrez, pues, agregó Méndez, con la sentencia absolutoria se contravinieron los criterios que la misma sala ya había fijado sobre dicho caso, cuando se validaron las declaraciones de los menores.

Para el equipo de abogados que apoya a la señora María Antonia Márquez, cuando los magistrados declararon “infundados” los dichos de los niños, éstos fueron “revictimizados” y quedaron en estado de estado de vulnerabilidad al quedar libres los responsables del homicidio. En la demanda también se exigió a la Procuraduría mexiquense que garantice la seguridad e integridad de la madre e hijos de la víctima.

Asimismo, los abogados exigieron a la dependencia que solicite la cooperación de la Procuraduría General de la República (PGR) para que se cumpla la orden de aprehensión contra Bernardo López, quien sigue prófugo, a pesar de que ha sido visto en diversas ocasiones.

DERECHOS VIOLADOS:
El gobierno mexicano ha violado contra NADIA ALEJANDRA MUCIÑO MÁRQUEZ, los siguientes derechos:
  • derecho a la vida (art. 4),
  • derecho a la integridad personal (art. 5),
  • a la libertad y seguridad personales (art. 7)
  • derecho a las debidas garantías judiciales y al debido proceso (art. 8),
  • a la igual protección de la ley (art. 24),
  • derecho a la protección judicial (art. 25)
Todos ellos con relación al artículo 1.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (en adelante "la Convención" o "Convención Americana"); además, el artículo 7 (deberes de los Estados para contar con los medios adecuados para prevenir, sancionar y erradicar la violencia) de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer ("Convención de Belém do Pará").

En contra de su familia:

MARÍA ANTONIA MÁRQUEZ HERNÁNDEZ, madre de Nadia;
RAFAEL MUCIÑO SÁNCHEZ -padre de Nadia Alejandra-;
ROCÍO ELIZABETH, VIVIANA GUADALUPE, RAFAEL, MAURO ISAAC y JACIEL, los cuatro de apellidos MUCIÑO MÁRQUEZ -las/os tres primeras/os hermanas/os y el último sobrino de Nadia Alejandra- y;
CARLOS RAFAEL, JOSÉ URIEL y FERNANDA, estos tres de apellidos LÓPEZ MUCIÑO -hijos de Nadia Alejandra-,
  • se violan el derecho de integridad personal (art. 5),
  • derecho a las garantías judiciales y al debido proceso (art. 8),
  • derecho a la protección de la familia (art. 17),
  • el derecho a la igual protección de la ley (art. 24) y
  • el derecho a la protección judicial (art. 25);
  • contra los últimos cuatro se viola además derechos del niño (art. 19)
Todo lo anterior, con violación al deber genérico del Estado de respetar los derechos y libertades reconocidas en la Convención y de garantizar el libre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción, sin discriminación (art.1.1).

Fuentes:

¡No te pierdas esta historia!

¡No te pierdas esta historia!
PRÓXIMAMENTE

¿DIVORCIO A LA VISTA? ¡PREPÁRATE!

Nuestro perfil en Facebook

Nuestro perfil en Facebook
Noticias y Actualizaciones diariamente

Dale LIKE y ÚNETE

Dale LIKE y ÚNETE
Fan Page

Visita el blog Crisálida, una esperanza perenne...

Visita el blog Crisálida, una esperanza perenne...
Con más artículos informativos

GUATEMALA: ¡DENUNCIA!

ARGENTINA

CHILE

URUGUAY

ESPAÑA

No lo maquilles!

Cristina Siekavizza (Reportaje sobre su desaparición)

Mindy Rodas: ejemplo brutal de violencia contra la mujer

TWITTER

Artículo en Mujeres Publimetro

Mi colaboración en Mujer Af

Powered By Blogger